Mi primer cabaret de flores y lechugas
Silvia Maytorena.
Con amor para el Club de Malabaristas Hmo.
Hace varios años, el Bryan “el güero de Agua prieta”, me contaba “lo
shhhhhhhhhhilo”
(sinónimo de curado, bien padre, bien shhhingón) que se ponía el cabaret
de flores y lechugas, la verdad la idea de lanzarle cosas a la gente me entusiasmaba
mucho pero lo que verdaderamente causo mi interés, fue ver cómo se
iluminaban los ojos de Bryan al contarme cada uno de los chous a detalle, era
como ver a un niño hablando de esa película favorita que ha visto 100 veces. Podría decirse que esperé siete años para poder lanzar lechugas.
El día había llegado y yo ya tenía hasta en la camiseta la fiebre de FiCHo,
había pasado toda una semana viendo CIRCO EN EL TEATRO, iluminaciones de
ensueño, cuerpos amorfos y poderosos, alegría, música y un motnón de clown, ¿qué más
podía pasar en el escenario?
De pronto una rubia despampanante emerge desde el público ¡es la presentadora!, el verdadero idioma del amor es el portugués "Fale comigo de perto". Ensalada aparece en escena, es un clown morocho con dientes de marmota y un corazón más grande que el teatro.
Seb y Blanca escalan las butacas para intervenir entre cada número con pequeños momentos titánicos; nace la música, vuelan clavas. Dulce, equilibrista de locuras, no puedo creerlo me he enamorado de un coronel que me hace reír, aquí las mujeres no caminan se suspenden por el aire, la fuerza es un don de todos, niños con súper poderes y Valeria tarareando con una sonrisa que opaca a las luces.
De pronto una rubia despampanante emerge desde el público ¡es la presentadora!, el verdadero idioma del amor es el portugués "Fale comigo de perto". Ensalada aparece en escena, es un clown morocho con dientes de marmota y un corazón más grande que el teatro.
Seb y Blanca escalan las butacas para intervenir entre cada número con pequeños momentos titánicos; nace la música, vuelan clavas. Dulce, equilibrista de locuras, no puedo creerlo me he enamorado de un coronel que me hace reír, aquí las mujeres no caminan se suspenden por el aire, la fuerza es un don de todos, niños con súper poderes y Valeria tarareando con una sonrisa que opaca a las luces.
Los lechugueros se apresuran a
repartir las lechugas y las flores, acaba el número, preparas y lanzas, aquí
nada se pierde, los lechugueros reciclan el amor del escenario y los vuelven a
repartir, tengo lechuga en el cabello, me guarde una flor en el bolsillo, río
como los niños. Mamá lo logré, viví un cabaret de flores y lechugas.
¡Gracias Omar por la ensalada de circo!,
gracias FiCHo por inspirarme la risa.
gracias FiCHo por inspirarme la risa.
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