Entrevista a Juan Pablo Villa

  • ¿Qué tan importante es para ti el canto cardenche?

Es extraño porque en realidad el canto cardenche llegó a mi vida muy joven, años después empecé a darle la importancia que ahora le doy. Primero el canto cardenche llego a mi corazón, entonces lo adopte y lo hice mío de alguna manera, fui a pedirle permiso a  los señores de interpretar sus canciones, aunque son de dominio público se me hizo muy importante conocerlos y empezar a hacer un vínculo con ellos, un vínculo que primero empezó con unas grabaciones, después yendo a conocer  a los cardencheros de sapioriz.
Los cardenches siempre me han acompañado en el escenario, me pareció importante producir cosas y que a los señores los escucharan más personas, me di a la tarea de empezar a producir eventos para ellos, hasta la fecha además de ayudarles a conectar con festivales, he producido dos encuentros grandes el primero fue en 2014 y el segundo en 2016; lo que queríamos era celebrar con la gente el canto cardenche, para este segundo encuentro organicé un coro que se llama Coro Acardenchado el cuál sigue vivo y ya grabó su primer disco, el coro además de difundir  el canto cardenche y las composiciones de varios artistas, han ayudado a la construcción del recinto cardenche, ellos dieron recursos para que la asociación civil se llevara a cabo y que finalmente el recinto cardenche fuera de los señores y de la propia comunidad y además los fondos que reúnen se les da a los cardencheros de sapioriz como una especie de regalía.

  • ¿De qué manera crees que repercute el canto cardenche a la sociedad?

Es un canto muy poco conocido y quien tiene acceso a él es tocado por su magia, es un canto muy peculiar en nuestro país, dada la instrumentación de la música el canto cardenche es un canto a capela poco utilizado en las tradiciones de este país; otra particularidad es que es cantado en español, entonces eso hace que sea mucho más inmediato el contacto con el espíritu, con la conexión y el sentimiento.
Quien escucha el canto cardenche no vuelve a ser el mismo, vuelve a valorar sus raíces o a volver buscarlas, es magia pura que penetra dentro y no se olvida jamás.

  • ¿ Por qué crees que se esté perdiendo el canto cardenche?

El canto cardenche sí estuvo en peligro de extinción, pero ahora en la propia comunidad las personas lo están cantando, no nada más lo hombres sino también las mujeres en la propia comunidad, además de todos nosotros que no somos de la comunidad y cantamos la canción cardenche.
Creo que el canto cardenche revive e insisto que la propia comunidad lo está aprendiendo y eso es lo más importante.

  • ¿Cuándo descubriste lo que podías hacer con tu voz?


Cuando tenía alrededor de 18 años llegué a un lugar muy importante en mi vida que fué el café jazzorca donde empecé a conocer mucha música que en mi entorno sociocultural no se escuchaba, me abrió el cerebro y los oídos, me permitió darme esta oportunidad de explorar la voz y desde entonces lo hago. Es un lugar que se especializa en la improvisación libre y el free jazz. 

  • ¿Cómo pasas de la inspiración a la transpiración?

Entrenando mucho en el laboratorio sonoro, en el espacio energético que genero para conocer nuevas formas locales, conocer más canción cardenche, también trabajo la improvisación, compongo, lleva tiempo, lleva horas.
Mi espectáculo los construyo con 3 ejes fundamentales que son la improvisación a partir de técnicas vocales extendidas o poco convencionales, el canto cardenche y composiciones que hago que tratan de la ausencia; la primer canción salió hace  algunos años con motivo de la desaparición de los 43 estudiantes y de ahí se ha ido tejiendo un canto necesario que toca este punto de la ausencia no solo como la ausencia en si sino también como la esperanza, muy trillado pero los queremos de regreso, no más feminicidios no más desapariciones en nuestro país.
Se me hace un canto urgente, cantar lo que estoy viviendo.

  • ¿Cómo es que partes de la energía del público para crear algo?

Siempre es diferente. Para mí un concierto es hacer todo un ritual que empieza con el silencio y termina con el silencio, y ese silencio el público lo interpreta con un final entonces aplauden, normalmente no hago pausas intento mantener esa energía de principio a fin como si fuera una puesta en escena, en el que el público no irrumpe con los aplausos sino que espera a que termine la obra.


Comentarios

Entradas populares